La isla de Mallorca en febrero tiene muchos encantos que hacen que este mes de invierno sea perfecto para visitar la isla. Febrero es el mejor momento para ver la floración de los almendros en todo su esplendor. El tiempo en Mallorca en febrero es bastante cálido y la temporada baja es un gran momento para explorar los pueblos del interior de Mallorca y de la Serra de Tramuntana.
Para los amantes del senderismo, esta es también una buena época para recorrer la variedad de rutas que ofrece la isla y especialmente la Serra de Tramuntana. Ver los campos llenos de almendros en flor hace que los paseos en febrero sean espectaculares.
Übersicht
El tiempo en Mallorca en febrero
Normalmente, el tiempo en Mallorca en febrero suele ser variable. Puede haber días o incluso semanas en las que el termómetro no baje de los 15 grados durante el día, pero al mismo tiempo puede haber días en los que, debido a una ola de frío, la temperatura puede bajar hasta los 6 grados o incluso menos por la noche, al igual que en las zonas altas de la Serra de Tramuntana.
Durante estos días suele llover un poco y la temperatura media oscila entre los doce y los trece grados. Suele haber niebla por las mañanas porque el contraste de temperaturas (hasta 16 grados por el día y 8 por la noche) en la isla de Mallorca favorece este fenómeno meteorológico. Es aconsejable llevar ropa ligera durante el día, pero al atardecer hay que llevar ropa de abrigo.
Dónde es más bonita Mallorca en febrero
La tranquilidad y el clima suave de febrero ofrecen la oportunidad de disfrutar más de los pueblos y de la ciudad de Palma. Entre los muchos pueblos con encanto de Mallorca destacan:
Pollensa
El pueblo de Pollença es uno de los lugares más emblemáticos del norte de la isla. Es uno de los pueblos más antiguos de esta región al norte de la isla de Mallorca. En los últimos años, personas de diferentes países, como Alemania, el Reino Unido y los países escandinavos, se han interesado por comprar una casa o una propiedad en Pollença. Las casas del casco antiguo de Pollensa conservan sus típicas fachadas mallorquinas. Contemplarlas mientras se pasea por las calles empedradas es un placer para la vista. En el centro del pueblo hay diferentes tipos de bares donde se puede disfrutar de un buen café o restaurantes donde se puede disfrutar de la cocina típica mallorquina. El ambiente vivido y sentido en el pueblo de Pollença nos da una idea de cómo era la vida en Mallorca hace 100 años.
Cuando visite Pollensa, no se pierda “el calvari”, el calvario con sus 365 escalones, al final de los cuales hay una capilla, y el mercado semanal que se celebra cada domingo por la mañana.
Banyalbufar
Este típico y encantador pueblo de Mallorca está situado en el suroeste de la isla, en el corazón de la Serra de Tramuntana. Su encanto se ve subrayado por el hecho de estar situado en una zona alta y cerca del mar, ofreciendo unas vistas impresionantes. Aunque está muy cerca del mar, toda la zona está llena de vegetación. Sus playas o calas son de roca y en la playa de Banyabufar se encuentran manantiales de agua dulce que fluyen desde la montaña directamente al mar. Muchos bañistas utilizan las fuentes como duchas Esta playa es poco conocida y suele haber poca gente en ella.Recomendamos rutas de senderismo por los alrededores de Banyalbufar como: Sa Volta Desb general. Esta ruta comienza en la Carretera C-710 y conduce a la playa de Port des canonges, a lo largo de este camino hay un sendero entre pinos y rocas hasta el mar. El nivel de dificultad es fácil
Valldemossa
Valldemossa está situada entre la ciudad de Palma de Mallorca y la Serra de Tramuntana. El viaje en coche dura entre 20 y 25 minutos desde la ciudad de Palma hasta el pueblo de Valldemossa.
Valldemossa está rodeada de montañas, lejos del turismo de masas. Sus antiguas casas mallorquinas y sus calles empedradas hacen del pueblo de Valldemossa una visita obligada para los turistas. Es uno de los pueblos más famosos de la isla, ya que el compositor Frederic Chopin y su amante George Sand pasaron un invierno (1838-1839) en la localidad de Valldemossa, concretamente en el monasterio. Los lugares más importantes de Valldemossa son: La Real Cartuja de Valldemossa, la iglesia de la Cartuja y la antigua farmacia junto a la Cartuja. La entrada a la Cartuja incluye un concierto de Chopin y una visita a la habitación donde el compositor Chopin pasó un invierno en Mallorca con su novia George Sand. Los utensilios de Chopin aún se conservan como su piano.
Orient
La ciudad de Orient está situada en la Serra de Tramuntana. Rodeado de montañas y bosques, es uno de los pueblos con más encanto de Mallorca. Tiene más de 450 metros de altura y aún conserva las típicas casas de piedra mallorquinas y la iglesia parroquial del siglo XVIII, construida sobre una capilla del siglo XIII.
Recomendamos un breve paseo por este encantador lugar y es una visita obligada:
Los baños públicos fuera del pueblo.
La ruta de la sal del Freu. Esta pequeña ruta es muy fácil de hacer y es una de las más bonitas de la isla.
Palma
Palma de Mallorca es una de las ciudades más famosas del Mediterráneo. Su estilo de vida y sus contrastes atraen a miles de turistas de todo el mundo durante todo el año. Es conocida por su variedad de tiendas de ropa y recuerdos. Las principales zonas de la ciudad son la plaza principal con pequeñas tiendas y restaurantes. La calle “Jaime tercero” y el Paseo del Borne ofrecen todo tipo de tiendas de las mejores marcas internacionales.
La ciudad de Palma de Mallorca ofrece varios atractivos culturales como el Museo Baluard y el Palacio de la Cultura de Marzo, donde se pueden ver muchas obras de diferentes artistas.
Hay que tener en cuenta que la ciudad está siempre despierta y nunca duerme. Te recomendamos la zona de Santa Catalina, donde puedes encontrar bares de moda y restaurantes de lo más cosmopolita.
El paseo marítimo y el puerto de Palma son también una visita obligada.